DORADA AL MOSCATEL

Que delicia de pescado, es uno de mis favoritos y normalmente todas las semanas la preparo una ó dos veces de distintas maneras.Casi siempre  la preparo a la plancha acompañada de alguna verdura o ensalada.La de hoy como he querido subirla al blog creo que era necesario hacerla más especial.

Esta receta reúne los requisitos que busco a diario en nuestra alimentación que son las verdurasd y una proteína saludable y la del pescado es ideal.

Buscando en mi memoria tengo que decir que una de las mejores doradas que he comido en mi vida fue en Sesimbra (en la costa de Portugal) en un conicido restaurante (Toni) simplemente estaba preparada a la brasa  pero estaba en su punto justo, jugosa, prieta y blanquísima.Una auténtica delicia estaba en todo su sabor sin enmascararlo nada absolutamente.

Bueno aunque no estamos en Portugal ni en el restaurante Toni, esta que he preparado tampoco está nada mal.

INGREDIENTES Y ELABORACIÓN

• Una dorada de buen tamaño
• 3 ó 4 pimientos del piquillo (podemos asar varios y quedará aún quedará mejor)
• 4 ó 5 tomates
• Una cebolla gordita
• Vino moscatel
• Sal
• Aceite de oliva virgen

En una fuente de horno la rociamos con un poco de aceite de oliva .

La cebolla la partimos en rodajas muy finitas y la ponemos a modo de cama en la fuente.

Colocamos la dorada encima de la cama de cebolla y la salamos .

A continuación partimos en daditos los pimientos y los tomates y lo agregamos a la fuente de la dorada.

Salamos y rocíamos con un chorrito de aceite.

Le ponemos un buen chorro de vino moscatel.El vino es preferible ir agregando poco a poco, cuando veamos que lo va necesitando es para que el plato no quede demasiado empachado en caldo.

Tendremos el plato unos 40 min en el horno a 180º, iremos mirando cada poco para ir rociando el pescado con la salsa para que no se quede seca¡¡FUNDAMENTAL!!! y si necesita más vino se lo ponemos.

Recién salida del horno con un aroma fantástico y además preciosa con esos rojos intensod de los pimientos y los tomates que combinan tan bien con los plata del pescado.
Es un plato de sabores intensos se concentra mucho con la cocción creo que debido al vino aunque se suaviza por el dulzor del moscatel.
Es una combinación muy muy buena de sabores.

Hay que comerla muy caliente recién salida del horno, aunque si nos quedan sobras no pasa nada se calienta en una sartén y la comemos al día siguiente.

Una opinión para los que no os guste un sabor demasiado fuerte a vino, se puede poner el vino en un cacito y dejar reducir un poco para que evapore alcohol, en el horno siempre se va a quedar más concentrado.

Espero que os guste y hasta nuestra próxiama cita.Un saludo con todo mi cariño desde el bazar de los sabores