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He tenido la gran suerte de vivir en un lugar privilegiado donde la naturaleza ha sido una compañera desde los juegos de mi infancia hasta ser el marco y alfombra el día de mi boda. Todas crecen año tras año en esos rincones de la casa de mi madre, ofreciendo generosas su particular festival de colores y de perfumes .Ellas saben que el cálido verano pronto llegará a su fin y se preparan para marcharse hasta su próximo estío dejando paso poco a poco a otros frutos y flores que volverán a deleitar con la simpleza de su belleza natural. La receta que os presento hoy es muy sencilla y seguramente todos o casi todos la hemos comido en algún momento.Es ideal para un aperitivo antes de comer e incluso para llevar como invitado y comprarlos ya preparados. Naturalmente los míos son caseros y el resultado ha sido muy bueno, los catadores le han dado una nota muy aceptable. INGREDIENTES Y ELABORACIÓN
Estiramos la masa de hojaldre hasta que quede finita de 1 cm. más o menos y con moldes de diferentes formas y si nos los tenemos vamos cortando en rectángulos y rellenamos unos de sobrasada, de pasta de anchoas, de jamón cocido y queso, de bacon. Podemos rellenar de todo lo que nos guste.Cuando estén rellenos les ponemos las partes de arriba y cerramos si veis que apretando con el dedo no queda bien cerrado mojaros un dedo en agua y vais cerrando, la masa al mojarse se sella con su mitad.Los pintamos con yema de huevo batida y los llevamos unos 25 minutos al horno hasta que estén doraditos. Los podemos comer calentitos o fríos, los míos los preparé el día antes y estaban muy buenos. Os dejo una foto para que los veais, y ya sabeis si no os atreveis a meteros en la cocina poneros en contacto conmigo.  |
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